El nuevo Marina Alta Colección es el lanzamiento de Bodegas Bocopa en el 25 aniversario de su vino más emblemático y supone un gran salto adelante en la interpretación enológica de la variedad blanca más emblemática de la DOP Alicante.
El Marina Alta cumple 25 años. Este emblema de la DOP Alicante marcó el inicio de una nueva era en cuanto a los vinos de moscatel —la variedad que hasta entonces estaba enológicamente confinada en la elaboración de mistelas— para fijar el rumbo de otros exitosos blancos mediterráneos adecuados a la gastronomía de su entorno y a las pautas de consumo basadas en el ocio, inherentes a la dedicación de la zona al negocio turístico. En 1993, el Marina Alta abrió un mundo de posibilidades con su versatilidad, su frescura y su amable suavidad, no aptas para enterados y sí para un amplísimo público libre de prejuicios. Sigue siendo el máximo exponente de una filosofía que su artífice, el enólogo y gerente de Bocopa, Gaspar Tomás, resume en una sentencia inapelable: hay que sacar el vino a la calle.
Tomás está en ese cargo casi desde el minuto cero y forjó Bocopa, fundada en 1988, desde la nada. Actualmente agrupa a las cooperativas de La Cañada, Castalla, Petrer, La Romana y Sax: más de trescientas familias de viticultores, además de otro centenar largo en La Marina Alta que suministran la uva para el vino homónimo. Gestiona más de mil hectáreas de viñedo y elabora la mitad del vino embotellado con DOP Alicante, lo que le convierte en todo un referente empresarial y también social, desde un cooperativismo bien entendido que apostó por el embotellado frente al granel, que ha consolidado una marca de prestigio sin ignorar la realidad del mercado y que ahora puede permitirse un salto cualitativo: el Fuego Lento 2014 —la segunda cosecha de un tinto pensado para codearse con los grandes— es sólo el principio del Proyecto Hispanicus.
En esa línea, el 25 aniversario de la reina indiscutible de la gama media o “estándar” propicia el lanzamiento del Marina Alta Colección, un blanco premium que tiene el reto de romper la disyuntiva del “verdejo o albariño”, al menos, en la hostelería de su entorno. Desde ahora, quien quiera un blanco con más pretensiones que las del Marina Alta “normal” puede optar también por un moscatel: el Marina Alta Colección. Bocopa ha seleccionado sus mejores parcelas en la comarca que le da nombre y ha incorporado recursos a la última, como la tinaja de barro o el depósito oval, además del roble francés y otros fuera de lo común, para una sofisticada crianza. El Colección es un Marina Alta tan fácil de beber como el de siempre, pero más serio y más complejo —encantadoras notas de melocotón, almíbar, almizcle o flores blancas— y seductoramente equilibrado en la boca. Son 4 mil botellas que van a parar sobre todo a los restaurantes de la provincia de Alicante y en una tienda salen a unos 12 euros la unidad.