GEORGES SIMENON. EDITORIAL ACANTILADO, 2016. El primer detective gourmet fue, seguramente, Nero Wolfe, cuyas aventuras policíacas y gastronómicas comenzaron en 1934. Las del comisario Maigret, un poco antes —su primera novela, Pietr el letón, es de 1931—, pero el personaje de Simenon no es un detective gourmet propiamente dicho. Sin embargo, de sus modales de fumador de pipa —perfectamente gastronómicos en sus tiempos— y bebedor de buenos aguardientes, así como de sus correrías por los bistrots de Montmartre, algo aprendieron Pepe Carvalho y otros “sabuesos” dados a la gastronomía. Algunas de las novelas protagonizadas por Maigret —72, y 28 cuentos— son pequeñas joyas de la narrativa del siglo XX y su manera de empatizar con el criminal ha dejado huella. En esta novela de 1955, traducida anteriormente como Maigret tiende un lazo, explora la psicología de un asesino en serie, con rasgos presentes en celebérrimas obras posteriores.
Novela
154 páginas
16 €
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