SANT PERE, 39. TEL.: 966 176 375. En Las Pocicas del Mar —el original Las Pocicas sigue en pie tierra adentro—, embutidos como la güeña, el relleno de Semana Santa y hasta la morcilla de La Puebla de Don Fadrique (Granada) adquieren unas connotaciones sugerentemente exóticas. Conviven en la propuesta de Las Pocicas del Mar con productos tan arrebatadores como un buen pimiento rojo escalibado con precisión artesana. O tan singulares como el queso de cabra de por allí, que, servido con una mermelada de romero entre tradicional y nouvellecuisine, es un bocado de los que pagan el viaje. Incluso una idea tan perogrullesca y brillante como un remojón de patata —entre tortilla y revuelto— con un buen salmorejo…
Son cosas de su pueblo que Emilio Trujillo y Rosa Mª González ofrecen en un elegante local con una deliciosa terraza. Diez años atrás abrieron Las Pocicas en La Puebla y desde hace poco reproducen en el paseo marítimo de Altea esa gastronomía rabiosamente auténtica. Su máxima expresión es una paletilla de cabrito segureño suculenta y jugosa, de sabor tan intenso como limpio. Tampoco se quedan atrás las croquetas de boletus o de brandada, el carpaccio de ventresca de atún, el bacalao con verduras y muselina de ajo o el brownie. Una atinada selección de vinos de aquí y de allá, incluyendo algún ilustrísimo, redondea una experiencia gastronómica la mar de interesante.
A la carta, desde 42 €. Menú degustación, 39/46 €. Abre todos los días
En Altea o cerca:
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