La gastronomía noruega está inmersa en una sugerente revolución y uno de sus principales argumentos es la pesca sostenible, como parte de una apuesta por los productos de proximidad, orgánicos y de temporada que va imponiéndose en restaurantes y supermercados: miel, queso, dulces, carnes, cervezas o cafés producidos de forma ecológica.
Los principales rasgos de la gastronomía noruega vienen determinados, en gran medida, por las costumbres agropecuarias del país, vinculadas a un singular entorno natural. Sus 130 mil kilómetros de costa, bañados por gélidas aguas, han marcado la identitad noruega a partir del aprovechamiento de los recursos naturales disponibles. Ovejas y cabras pastan en el litoral y en las montañas. El frío y la escasa contaminación permiten cultivar frutas y verduras sin abusar de pesticidas. Pequeñas granjas producen leche, queso y carne bajo una estricta normativa, particularmente rigurosa cuando se trata del bienestar animal. Y, sobre todo, la extensa costa noruega es tan rica en capturas como en unas tradiciones que la abocan a la pesca sostenible.
Las aguas frías y cristalinas le dan al pescado noruego una acusada personalidad. La gastronomía noruega incluye en sus banquetes tradicionales, además de mariscos, el famoso salmón ahumado, la trucha ahumada y el gravlax. El tørrfisk (bacalao) fue el producto más exportado desde Noruega durante muchos años y en las zonas del Norte, especialmente en Lofoten, siguen estando orgullosos de él. El skrei, por su parte, le debe sus peculiares características al proceso migratorio de los enormes bancos de bacalao procedentes del mar de Barents, que recorren mil kilómetros a través de aguas agitadas y muy frías para llegar a la costa norte de Noruega.
La industria pesquera noruega se considera una de las más sostenibles del mundo, a partir de una gestión de los recursos que no excluye la tecnología más innovadora cuando se trata de proteger y salvaguardar las comunidades pesqueras pensando en las generaciones futuras. El sector marítimo de Noruega se enorgullece de la calidad de sus productos y de sus técnicas respetuosas con el medio ambiente. La producción de alimentos procedentes del mar es vital para la costa del país con casi 50 mil puestos de trabajo locales. La industria marítima es esencial para la economía noruega y constituye el 70% de sus exportaciones. Noruega es el segundo exportador mundial de productos del mar y vende a más de 140 países. El Consejo de Productos del Mar de Noruega certifica y garantiza su procedencia mediante el distintivo Seafood from Norway. El país se reivindica como líder mundial en cuanto a la pesca sostenible, estrechamente vinculada a la gastronomía noruega.
FOTOS de Christian Roth Christensen, Pete Oswald, Sara Johannessen y Alexander Benjaminsen, cedidas por Innovation Norway
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