El programa de enoturismo de verano de Bodega Otazu conjuga vino de pago, patrimonio histórico, arte contemporáneo y entorno natural a 8 kilómetros de Pamplona. Una de las actividades consiste en una visita de 90 minutos por el museo del vino que alberga la bodega, con la colección de arte contemporáneo de la Fundación Otazu. La restauración del edificio de 1840 da paso a la actual sala de barricas, La Catedral del Vino, con una cromosaturación del artista venezolano Carlos Cruz-Diez, uno de los mayores exponentes del arte cinético. Como colofón a la visita se catan dos vinos de Bodega Otazu y se puede elegir los de alta gama.
Esta actividad de enoturismo de verano se puede ampliar a 2 horas con un recorrido por el Señorío de Otazu: la iglesia románica del siglo XII, la torre de defensa y palomar del XIV y el Palacio Cabo de Armería del XVI. De camino a la bodega, se pasa por los viñedos y después se catan tres vinos. Se puede completar estas experiencias con un picnic al atardecer o con una noche en el Hotel Alma Pamplona Muga de Beloso. También se puede crear una experiencia a medida con degustación de vinos y pintxos del estrellado Koldo Rodero, sobrevolar el Señorío de Otazu en helicóptero o participar en la propuesta Ser enólogo para conocer el proceso de elaboración y participar en el ensamblaje final, con el que el visitante crea su propio vino. En la Visita Premium, la cata la guía el enólogo de la bodega.
Bodega Otazu, la más septentrional de España para la producción de vino tinto, está entre la Sierra del Perdón y la Sierra del Sarbil, con el río Arga como delimitador natural. Todos sus productos se elaboran con las uvas procedentes de sus 110 hectáreas de viñedo —tempranillo, cabernet sauvignon, merlot, chardonnay— y tienen el reconocimiento de Vino de Pago que sólo ostentan catorce bodegas en España.
Dos vinos de Otazu:
· SEÑORÍO DE OTAZU 2009. Elegancia atlántica
· PAGO DE OTAZU 2013. En el top de los blancos españoles