Els Vents, tras casi un década de luces y sombras en el puerto de Alicante, se ha trasladado a Castaños, la calle más concurrida y de moda. El restaurante de José A Sánchez, en el local donde había intentado fórmulas como la del gastrobar, se ha encaramado directamente a los primerísimos puestos de la alta restauración alicantina.
El traslado de Els Vents a la calle Castaños no es un arreglo como los que intentaron relanzarlo en el puerto —donde este restaurante tuvo sus cinco minutos de gloria después de su apertura en 2009— ni un experimento como Mordisco o Eolo, los anteriores negocios del joven chef alicantino José A Sánchez en el local a donde se mudó este verano. Con el cambio de escenario, aparece una cocina sabia y madura que trasciende el neoclasicismo —aprendido en Drolma o Zuberoa— a base de modernidad sin piruetas, en un novísimo proyecto que se encarama directamente a los primeros puestos de la alta restauración alicantina. Entre sus bazas están el interiorismo —elegantemente contemporáneo—, la repostería —con Fran Segura al frente— y la destacada aportación del maitre y sumiller Tomás Moreno. También cocinero —de formación—, estuvo al quite en los momentos más difíciles para el chef y le sigue dando un enorme empaque al servicio —coctelería incluida— o a la bodega: para empezar, una brillante selección de trescientas referencias, casi la mitad internacionales.
La máxima expresión gastronómica del nuevo Els Vents está en la Mesa Martina. No es una “mesa cero” de las que no cuentan en la numeración del comedor porque están en la cocina, pero sí una propuesta que incluye un trato directo y particular —con el chef al frente de un menú donde echa el resto— o un deslumbrante menaje destinado exclusivamente a este reservado, en el que toda la puesta en escena se distingue de la del resto del local. Todo se resume en el Menú Martina (120 €) que expresa el nuevo estilo de Els Vents. Hay fondos de cocina, comedidos efectos especiales —unas nitroperlas de verdura, un plato que echa humo—, grandes productos —ostra, caviar, bogavante, salmonete, lenguado— que no acaparan protagonismo frente al concepto, contadas notas exóticas, homenajes a grandes gastrónomos —Apicius, Curnonsky, This— y muchísimas referencias al entorno, desde los cítricos hasta el esmorzaret en El Postiguet.
En la cumbre del primer Menú Martina aparecía la genial ventresca Heinz Orth —fundador del Girasol de Moraira—, templada en aceite de morcilla, con crema de yema primaria y mollitas de mar. También, el conejo con melocotón y caracoles, el pichón osmazomo o una declinación del foie —huerta, mar, montaña y al fondillón— y otra del turrón —mousse, gianduja y bizcocho, con un cremoso de fondillón y un trampantojo de marcona—, sin desmerecer ni uno de los dieciocho pases de este menú —hay otros dos, a 55 y 80 €— con el que Els Vents ha renacido para triunfar de una vez por todas.
Castaños, 3. 03001 Alicante. Tel.: 965 215 226
A la carta, desde 66 €. Menú, 55/120 €. Cierra los domingos
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