El desembarco de Quique Dacosta en Madrid es sin duda el hito más ambicioso del proceso de expansión empresarial emprendido por el cocinero años atrás. El chef, que ostenta tres estrellas Michelin en el Quique Dacosta de Dénia y otras dos en El Poblet de València, es el encargado de diseñar, desarrollar y dirigir todas las propuestas gastronómicas de los cinco restaurantes y bares del Ritz de Madrid, que abrirá de nuevo sus puertas el próximo verano tras su incorporación al Grupo Mandarin Oriental y después de la reforma más profunda realizada en sus 110 años de historia. Con el desembarco de Quique Dacosta en Madrid, el restaurante gastronómico del Mandarin Oriental Ritz, con vistas al emblemático jardín del hotel, aspira a convertirse en un referente “nacional e internacional” dirigido por el chef, que ofrecerá también cocina clásica bajo una espectacular cúpula de cristal —oculta durante 80 años y cuidadosamente restaurada— y se ocupará del servicio de banquetes, además de otras propuestas gastronómicas que incluyen bar de champagne y menú de tapas.
El hotel fue diseñado y construido en 1910 bajo la supervisión del legendario César Ritz, y ahora se convierte en el segundo Mandarin Oriental de España, después del de Barcelona, que cuenta con Carme Ruscalleda y Raül Balam en la dirección de sus cocinas. Partiendo de sus orígenes asiáticos y convertido en una marca global, el grupo opera actualmente 32 hoteles y siete residencias en 23 países y territorios.
