ANTHONY WARNER. EDITORIAL ARIEL, 2018. Las nutripolleces llevan a un cabreo sin límites a Anthony Warner, un cocinero bloguero británico —licenciado en bioquímica, eso sí— indignado ante la pandemia de ignorancia alimentaria que causa estragos en Internet, en los medios de comunicación convencionales o en las librerías. Hablando de dietas milagrosas, de superalimentos o de supervenenos —el último, el azúcar— y de otras “creencias new age”, el autor de El chef cabreado utiliza ese término —nutripolleces— y muchos otros, como “charlatanería” o “nutriblablablá”. Y refiriéndose al “lobby de la salud y el bienestar”, habla de “imbéciles sin cualificación alguna” o de famosos compinchados con médicos sin escrúpulos, que llegan a ser “muy canallas” cuando hacen listas de alimentos que curan el cáncer y alimentos que lo producen. Pese al tono pendenciero, no pierde el rigor detallado de unos argumentos científicos implacables y no deja de constatar que la comunidad científica también es culpable del aluvión de nutripolleces que sufrimos: si fuera más eficiente, la pseudociencia no lo tendría tan fácil.
Ensayo
356 páginas
18,90 €
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